Ingredientes
Gambones
Aceite de oliva
Azafrán en hebra
Perejil picado
Sal / Vino blanco
Patatas / Cebolla fresca
Elaboración
1.- Picamos la cebolla y la ponemos a pochar.
2.- Cuando esté la cebollita fresca transparente, le añadimos, un buen chorreón de vino, perejil picado y agua. Dejamos que hierva un poquito, unos 5 minutos.
3.- Tras estos 5 minutos, es hora de poner las rodajas de salmón, la patata hecha daditos y las almejas. Dejamos que se vaya haciendo con tranquilidad, como diría mi madre, a fuego lento.
4.- Pasados unos 30 minutos, agregamos los gambones. Los dejamos unos 5 minutos que se hagan, y les damos la vuelta para que por ambos lados se cuezan.
5.- Hechos los gambones, el plato está para servirse. Delicioso, jugoso y sabroso.
El salmón, aún sabiendo, que es un pescado con muchas propiedades y muy bueno para la salud, a mi me cuesta mucho comerlo. Como dicen los niños: ‘se me hace bola’. Con esta situación, no tengo más remedio que disfrazarlo y hacerlo de tal manera que no quede seco.
Esta forma de prepararlo es muy rápida y sencilla, a la vez que, de nuevo como diría mi madre, muy lustrosa. Las almejitas, los gambones, la patata, hacen un caldito trabadito que está delicioso.
Si nos tomamos un vasito de vino blanco y una ensaladita, la comida nos queda muy completa.
Como antes he nombrado a mi madre, recordando lo que decía: ‘que se haga la comida a fuego lento, que es como mejor queda’, os dejo con la canción de Rosana, ‘A fuego lento’